viernes, 14 de enero de 2011

ES LA HORA DE ACTUAR



Queridos hijitos mios:

Les agradezco las atenciones que a lo largo de este tiempo han tenido hacia conmigo y hacia los seres de luz que siempre desde nuestro interior les estamos iluminando su mente y sus corazones.
Quiero manifestarles que los tiempos, son tiempos de actuar, de moverse y verse motivados por un mundo de amor, un mundo diferente al que ven ahora, un mundo en el que los obstáculos y los sufrimientos paran, dejan de ser importantes y cada vez en el momento que ustedes lo decidan, así sucederá; basta con creerlo desde adentro de ustedes mismos , desde su interior lleno de amor que no han logrado descubrir pero que es real y que existe.
Deben sujetarse a un nuevo estilo de vida, cambiando los viejos patrones que han seguido durante mucho tiempo. Pero ha llegado el momento de decirle adios a esa forma de pensamiento de estancamiento que los retiene y que no los deja ser completamente libres y recuerden que la verdad es la que los hará verdaderamente libres.
Asuman esa verdad con un nuevo enfoque en donde se le da valor a lo que realmente lo tiene, no sólo a aquello que materialmente observan, sino por el contrario, darle su debida importancia a aquello que no ven pero que existe. Y es no sólo en sus pensamientos creánlo. Basta con que así lo crean y depositen verdaderamente toda su fé para que exista, para que sea real, para que se manifieste.
Aquí es donde entramos todos los seres de luz, los iluminados, los que somos la chispa divina del Padre Magestuoso, creador del cielo y la tierra, de lo visible e invisible, todos aquellos que confiamos en sus buenas desiciones, porque creanme, les toca a ustedes ser los responsables de esto que sucederá... sean sensibles, genuinos y amorosos.
Que dejen de darle importancia y valor a muchas cosas que no las tienen, sean cooperativos y misericordiosos con los suyos y con quienes se encuentran a todo su alrededor.
Me da gusto, la manifestación de amor que tienen al ceder parte de su tiempo y empeño al trabajo cuando lo encomiendan diariamente al Padre y que entonces se convierte en bendito.
Tu Dios, tu amigo, tu hermano.
Jesús.